Antes de que se declarara la pandemia de Covid-19, tres empresas argentinas formaron un equipo multidisciplinario para desarrollar productos industriales antimicrobianos orientados al cuidado de la salud aplicando nanotecnología.

A partir de su campaña «Asepcia total«, Nanotek desarrolló una técnica que consiste en la fabricación de nanopartículas de plata que, aplicadas a cualquier sustrato, ataca virus, hongos y bacterias. En alianza con empresas de pintura, telas y plásticos dan protección microbial a diferentes productos.

«Las partículas de la nanoplata (denominada nanArgen) crean una barrera eficiente, natural y estable térmicamente», explicó Horacio Tobías, presidente de Nanotek. Este desarrollo logró que productos de cualquier componente estén libres de microbios.

Desde las empresas desarrollan proyectos que atienden a las necesidades de la sociedad. «Con esta crisis hubo un cambio cultural; los hábitos de limpieza y protección llegaron para quedarse», aseguró Facundo Delaico, gerente comercial de Best Paint.

Esta última elabora la única pintura antimicrobiana en el país con larga duración a partir del uso de las nanopartículas de plata. Es una pintura al látex acrílica que logra un poder antiséptico total.

La pintura se utiliza para ambientes sensibles de alta contaminación microbiana como hospitales e industrias alimenticias
La pintura se utiliza para ambientes sensibles de alta contaminación microbiana como hospitales e industrias alimenticias

La pintura se utiliza para ambientes sensibles de alta contaminación como hospitales e industrias alimenticias, pero también tienen una línea para el hogar. El Hospital de San Isidro y el Sanatorio Finochietto son dos instituciones que ya llevaron esta pintura a sus paredes y superficies. «No solo protege a los pacientes, brindándoles un ambiente limpio, sino que también cuida a todo el personal de salud y limpieza que están en contacto con estos espacios», comentó Tobías.

«La pintura es implacable, inocua y más efectiva para su limpieza», explicó Delaico.

«Las nanopartículas son 10 veces más chicas que el Covid-19 y 100 veces menores que una bacteria. Al ingresar al foco de microbios los mismos iones de plata desnaturalizan el ADN del virus y de la bacteria; estos se autodestruyen eliminando todo rastro alguno», explicó Tobías.

Con esta misma tecnología, Nanotek produce un alcohol en gel que brinda una protección de por lo menos seis horas. Esta persistencia bactericida solo puede deberse a la actividad de las nanopartículas de plata.